A diferencia de un nutriólogo, un health coach abarca alimentación, hábitos, ejercicio y hasta meditación…
Ser Health Coach es una profesión padrísima con muchos beneficios:
- Puedes ejercer una carrera siendo dueño de tu tiempo. Eso significa que puedes balancear con mayor facilidad tu profesión y tu vida personal. Esto se tradujo para mi en calidad de vida, que antes no tenía cuando ¡trabajaba 60 horas a la semana!
- Puedes ejercer la carrera de Health Coach y al mismo tiempo tener otra actividad profesional o cuidar de tu familia. En mi caso, el health coaching no es a lo único a lo que me dedico, también soy empresaria y entrenadora de coaches con PNL.
- Siendo Health Coach tienes la libertad de elegir el área que más te fascina y enfocar tu conocimiento en nutrición, deporte, manejo de las emociones, ayudar a otros a bajar de peso o ayudar a aliviar alguna enfermedad, etc.
- Al graduarte como health coach puedes trabajar como profesional independiente atendiendo clientes o trabajar para algún centro de nutrición, yoga o fitness.
- Como health coach puedes trabajar desde tu casa, porque hoy la tecnología acerca a las personas. Un Health Coach muchas veces se reúne con sus clientes de manera virtual cuando se encuentran lejos o los horarios no coinciden.
La gente necesita un Health Coach para ser más saludables
- Hay mucho trabajo que hacer en el mundo y se necesitan muchos más Health Coaches para ayudar a prevenir y revertir las consecuencias negativas del estilo de vida moderno.
- El Health Coach no sustituye a los nutriólogos, ni a los médicos. Al contrario, pueden trabajar juntos para poder darle una atención más integral a las personas.
- Un Health Coach ayuda a sus clientes a reemplazar sus viejos hábitos por otros más saludables a largo plazo.
- Un Health Coach ayuda a su cliente a tomar responsabilidad por lo que le sucede y eso le permite cambiar su vida al tomar acción sobre las cosas que no le benefician.